The surveillance cameras of a Marshalls clothing store in New York, captured the moment when Raymond D. Stover entró a un probador con cuatro camisas y más tarde simuló que las devolvía. Lo que en realidad pasó es que puso en un estante cuatro playeras de bajo costo que llevaba debajo de su ropa y se robó las prendas del negocio. El mismo día fue a otra sucursal a “devolver” las cuatro camisas sin presentar un recibo de compra y le dieron una tarjeta con un crédito de 157 dólares.

Stover was a professional thief who used the same technique to defraud the Marshalls and T stores.J.Maxx, receiving cards that changed for cash in pawns and people who accepted their offer. Entre mayo de 2014 y agosto de 2018, este neoyorquino de 36 años robó casi 150,000 dólares en mercancía en tiendas de la cadena TJX en varios estados, según la Fiscalía federal.

Before the government took the case, TJX spent $ 19,000 investigating these robberies. A finales de agosto, un juez federal lo sentenció a más de dos años de prisión y le ordenó pagarle 169,330 dólares a dicha cadena, sumando lo que hurtó y el costo de las averiguaciones que lo llevaron a la cárcel.

El llamado ‘crimen organizado minorista’ sigue siendo uno de los principales dolores de cabeza de farmacias, supermercados y tiendas de ropa. Lo realizan grupos delictivos, ladrones solitarios y empleados. Representa una pérdida anual de 45,000 millones de dólares y durante la pandemia por el coronavirus ocurrieron incluso más incidentes.

Seis de cada diez negocios afirmaron que en 2020 fueron afectados por el robo hormiga, un incremento que atribuyen a la crisis sanitaria, concluye una reciente encuesta de la Federación Nacional de Minoristas (NRF).

Casi 40% de los establecimientos encuestados dijeron que se habían visto un aumento en fraudes de compras en internet con la opción de recoger los artículos en las tiendas, el doble del 19% que lo experimentaron un año anterior.While 28% responded that they saw more robberies within the establishments.

In general, the loss rate was 1.6% of your inventory. Los artículos más cotizados por los amantes de lo ajeno fueron ropa de diseñador (22%), detergente (17%), bolsos de diseñador, medicinas para alergias, rastrillos y licor costoso (15% cada producto), así como analgésicos (13%) y blanqueadores de dientes y fórmula para bebé (11%). Este último se usa también para rebajar droga.

Energy drinks are also carried (9.3%), deodorants (7.4%), anticonceptivos, aspiradoras caras, tabletas, computadoras portátiles, muebles y juguetes (5.6%).Several of these products are sold on Amazon and in other electronic places.

The cities where there were greater losses due to this illegal activity are Los Angeles, San Francisco/Oakland (California), Chicago (Illinois), New York and Miami (Florida).

Thieves employees

“Los minoristas han cambiado sus prácticas durante la pandemia para garantizar que sus empleados puedan trabajar en un entorno seguro y que sus clientes puedan comprar de manera segura, ya sea en tiendas, en internet o a través de vías como comprar en internet y recoger en la tienda”, dijo Mark Mathews, vicepresidente de investigación y análisis de la industria de la NRF, en un comunicado.

“But the new ways to buy have also opened new ways for criminal activity.As retailers adapt to address these new threats to security, the need for federal support is even greater to combat these dangerous and harmful activities, "he added.

La mayoría de los establecimientos dijeron que invirtieron en más personal y tecnología para prevenir que los clientes se llevaran los productos sin pagar, según el sondeo de la NRF.

Un dato revelador es que fue incluso más elevado el costo promedio de las pérdidas por empleados deshonestos: 1,551 dólares, la segunda cifra más alta desde 2015, de acuerdo con la encuesta.

Although last year there were fewer workers who were surprised stealing, the amount was greater.Half of the businesses replied that he had lost at least $ 1,000 for that illegal practice, compared to 29% in 2019.

Retail companies have been trying to stop this crime for several years, but their efforts have not always been well received by the authorities. Fue el caso del programa llamado Corrective Education Company (CEC o Educación Correctiva de la Compañía) de la cadena Walmart, que llevaba a una habitación aislada a los clientes que sospechaba trataban de robarse algo.

Bajo la amenaza de llamarle a la Policía para procesarlos penalmente, obligaba a los sospechosos a ver un video creado por el CEC, firmar una confesión del delito, pagar hasta 500 dólares y someterse a un programa de “modificación de comportamiento” de seis horas.If they did not pay the agreed. Más de 13,000 californianos o el 90% de los detenidos en las tiendas se inscribieron al programa.

La Fiscalía de San Francisco lo catalogó como una “extorsión y un falso encarcelamiento” y presentó una demanda en noviembre de 2015. Mientras avanzaba el litigio, el gigante minorista anunció que había donado 200,000 dólares del CEC a un programa de mentoría del Departamento de Justicia que permitía que niños jugaran con miembros de agencias policiales.

It was not enough to win the demand. En agosto de 2017, un juez de San Francisco falló a favor del gobierno y le ordenó a Walmart eliminar su polémica iniciativa antirobos.