Ir de compras ropa al centro comercial es una actividad que se disfruta mejor con la mejor actitud y lleno de paciencia, pero a veces esa paciencia puede diluirse al ver los precios de la ropa y lo peor es compararlos con las prendas de chicas. Aunque haya prendas que fácilmente vayan bien en ambos sexos, las distinciones físicas existen y en muchas ocasiones las tallas no suelen coincidir.

El famoso impuesto rosa sobre los productos de higiene y cuidado personal femenino existen y en definitiva no son para nada justificados. En el otro lado de la moneda también existe un desbalance en la ropa de vestir básica entre hombres y mujeres. Llega a ser tan grande en ocasiones que es común escuchar una comparación sobre cuántas prendas se hubiera comprado si fuera chica con el dinero que compró solo dos jeans. ¿Es real esta analogía?

En las tiendas como “low cost” es usual que los pantalones, sudaderas o camisetas básicas sean más caros para los hombres que en la de mujer. La respuesta parece hallarse en que los comercios textiles elevan los precios de la ropa masculina ya que los varones compran, de media, menos prendas que las mujeres.

Según el estudio hecho por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) con sede en España, las mujeres dedican un 23,2% de su presupuesto dedicado a ocio y entretenimiento a comprar ropa y calzado, mientras que los hombres solo destinan un 12,3%.El estudio arrojó que ellos desinan su presupuesto en fiestas, tragos, cenas o comidas.

En los accesorios, las gafas de sol o relojes suelen ser más caros en el caso de los hombres. Los relojes al parecer son el equivalente en los zapatos de las mujeres, pues en ocasiones se convierte en obsesión, pero si el presupuesto es limitado uno o dos relojes se llevarán gran parte del presupuesto.

Según otro informe publicado por por Ape to Gentleman, el sexo masculino esta más dispuesto a pagar más por los atuendos básicos que a su vez se convierten en el centro de su apariencia. Un estilo más marcado que algo pasajero.

Ya sea un look casual o un look formal, “las necesidades básicas como esta creo que están listas para pagar más”, dice Alessandro Sartori, director artístico de Zegna.

Otra razón, los hombres se visten de manera más informal y la ropa básica se convierte en must de manera más excesiva. La durabilidad en la ropa es otro factor que toman en cuenta a la hora de vestir, por ejemplo, la maravilla de los jeans es que unos de calidad por un precio medianamente elevado están justificado porque pueden usar durante años. Además de que es fácil combinar con un blazer, sneakers o camisas y playeras.