21 02
"La historia demuestra que hasta ahora ellos han sido los genios. Pero ya basta, es nuestro turno"

Rosa Clará y Teresa Helbig, dos mujeres empoderadas y osadas y que cumplen al mismo tiempo sus 25 años en el ámbito de la moda son las dos protagonistas de la nueva edición de Diálogos de Vanguardia. En una conversación con la periodista Joana Bonet en el Palau Macaya de Barcelona, nos hablan de los desafíos contemporáneos de la moda, una de las industrias más contaminantes del planeta, y también una de las más activas en las vanguardias sociales y con un importante rol de las mujeres en el sector. Entre la creatividad y el negocio, entre el sueño y la vigilia, sus diseños siguen floreciendo para dar voz y actitud a la mujer. Para empoderarla, más en estos rarostiemposde cambio.

El machismo existe en la moda ya desde que surge a mediados del siglo XIV"

Teresa HelbigDiseñadora

J.B.- Y que no volvamos hacia atrás...

T.H.- Eso espero. Hay muchísimas propuestas, muchas mujeres, Maria Grazia Chiuri (Dior), Miuccia Prada con su filosofía de ofrecer otra historia a la mujer y nosotras tenemos la libertad de escoger lo que más nos guste o aquello con lo que más nos identificamos.

R.C.- Estoy muy de acuerdo en que la moda ha ayudado a muchas mujeres a liberarse de muchas cosas. Hablabas de Cocó Chanel, sí, fue grande. Ella nos pasó del corsé al pantalón igual que Mary Quant que nos puso la minifalda…Sí que ha servido de alguna manera para irnos liberando.

La moda ha ayudado a muchas mujeres a liberarse de muchas cosas"

Rosa ClaráDiseñadora y empresaria

J.B.- ¿Cuál es el desafío contemporáneo? ¿Hay que reformular un nuevo sistema que contamine menos, que sea más inclusivo y sobre todo más sostenible?

R.C.- Es que la sostenibilidad no ha llegado más que para quedarse. Cada vez percibimos en nuestras clientas una sensibilidad mayor en este tema. Pero la realidad es difícil, es muy complicada. Nosotros a nivel de empresa reciclamos, energía solar, controlamos plástico, controlamos papel, pero cuando sales a buscar tejidos es muy difícil encontrarlos ecológicos de verdad. En vestidos de novia, el compaginar que sean bonitos, que sean ecológicos, que todas las capas lo sean es muy difícil, decir que todo es ecológico sería una mentira. Estamos con compañías que se dedican a fabricar tejidos insistiendo en que la sensibilidad está ahí. Ojalá tuviéramos esos tejidos, pero aún no es así.

Todavía es muy difícil encontrar tejidos realmente ecológicos"

Rosa ClaráDiseñadora y empresaria

T.H.- Nosotros somos una empresa pequeñita, no producimos stocks y es otra forma de trabajar. No hacemos grandes envíos… sí que es cierto que este discurso está calando pero esaprecisamente es nuestra forma de trabajar de siempre. Admiro una gran empresaria como Rosa, pero nuestro sistema es muy distinto. Nosotros hacemos vestidos únicos, los tejidos nos los confeccionamos nosotros mismos en nuestro atelier… es un modelo muy distinto.

J.B.- ¿Cuál es tu conexión con Hollywood, Teresa?

T.H.- Teresa Helbig es lenta y todo lo hace poco a poco, pero llegamos a Los Ángeles... Fue una experiencia maravillosa, tuvimos una gran acogida con clientas y estilistas… y cuando todo estaba en su mejor momento, de repente llegó la pandemia. Ahora lo volvemos a retomar de nuevo sin cambiar nuestro sistema de siempre, de venderlo todo en el atelier adonde vienen nuestros clientes cuando no somos nosotros quienes vamos a verles. Pero sí que Los Ángeles es un sitio que me vuelve loca. Es un sitio donde quiero estar.

J.B.- Ambas trabajáis con la familia, ¿hay conflictos?

R.C-. Para nada. Somos una empresa multinacional con 100% de capital familiar estamos mi hijo y yo al frente. Él es arquitecto, decidió venir aquí y primero se preparó. Se fue dos años a China, habla chino…

T.H.- Mi marido es quien lleva los números. Trabajar en familia son todo ventajas, es más, yo vivo justo encima del taller…

J.B.- ¿Qué diríais a aquellas personas que todavía niegan que la moda sea cultura, que todavía la asocian con la frivolidad?

T.H.- Yo no diría que la moda sea arte, quizá sería excesivo, pero la moda sigue siendo un reflejo de lo que es el momento y tiene mucho que decir. Y en cuanto a la frivolidad, si vieran las horas… es un trabajo duro, de mucha constancia.

La moda no es frívola, tendrían que ver el trabajo duro que hay detrás"

Teresa HelbigDiseñadora

Este año el vértigo de la hoja en blanco ha sido brutal, nadie se casaba"

Rosa ClaráDiseñadora y empresaria

R.C.- Sí que hay una parte de arte en una creación. Yo siempre digo que lo más duro es cuando te colocas con tu equipo ante una hoja en blanco para impulsar una nueva colección. Lo que pones en los papeles en blanco tiene que salir, porque luego hay mucha gente detrás. Da vértigo.Y vértigos hay cada día. Hay miles de vértigos pero el de la hoja en blanco se ha complicado con la pandemia. Ha sido algo muy duro. Muy duro.Ha sido un vértigo espectacular. Nadie se casaba.

J.B.- ¿Cómo lo habéis superado?

R.C.- Con economía de guerra, pero estamos en un sector que ha esperado, la novia que se quiere casar se casará. En Estados Unidos e Inglaterra van en vacunación unos dos o tres meses por delante y ya se nota que la vida es más normal. Creo que a nosotros nos pueden faltar dos meses pero ya estamos ahí.

T.H.- La pandemia nos tocó, lo de Los Ángeles se paró pero yo soy una lanzada así que para mantener la ilusión y el equipo montamos Petite Helbig. Todo para sustentar las ganas y la ilusión. Además abrimos nuestro showroom en Madrid… ante el mal tiempo, pues venga, nos lanzamos.

Creo que aquí nos faltan un par de meses para la recuperación, ya estamos ahí"

Rosa ClaráDiseñadora y empresaria

J.B.- ¿Cuáles han sido vuestros referentes en la moda? ¿Y por qué esa asimetría entre diseñadores hombres y mujeres?

R.C.- En la vida de la mujer hay mucho sacrificio estando al frente de una compañía. Hay muchas cosas que dejas en el camino y muchas no están dispuestas a hacerlo. No es ni mejor ni peor, simplemente es una realidad. Nosotras podemos elegir nuestro camino y el que yo he escogido ha sido crear mi empresa, en Barcelona tengo que pagar nómina de 500 personas, esto es un panorama. Otra opción igual de válida es la de aquellas que se plantean que quieren cuidar a sus hijos y que cuando lleguen a casala encuentren. Los dos son muy respetables y yo diría que estamos en un momento que todas (o casi, sería injusto decir que todas pueden hacerlo) podemos decidir qué camino queremos tomar. En una vida profesional hay mucha renuncia.

T.H.- La renuncia es cierta. Pero yo creo que de verdad viene de muy atrás. Que nos lo han puesto difícil históricamente. Si es que se ve en el arte, se ve en todo. Es difícil ver pintoras. Pero ahí estamos todas con la sororidad y la empatía.

J.B.- Carmen Mir, una modista de Barcelona desfiló en la Feria Mundial de Nueva York, y también están Madame Grès, Jeanne-Marie Lanvin, Madame Vionnet…pero más allá de Coco Chanel, hay muchos nombres de grandes diseñadoras que se han diluido...

R.C.- Pero ¿renunciaron? ¿eligieron? No lo sé. Yo en mi caso elegí, no sé si bien o no, pero lo hice

T.H.- En mi caso, el taladro de mi madre, siempre independiente, y eso ya lo llevo en vena. Lo elegí.

JB.-¿ Y los referentes?

R.C.- Van surgiendo. Van cambiando como la vida. No he tenido un referente, he tenido muchos. Yo diría que la ropa que me he querido poner en cada momento.

T.H.- Mi referente ¡Saint Laurent! Yo le llamo ya tito Saint Laurent. Me gusta muchísimo. Por supuesto Chanel, Alaïa, McQueen… he llorado de emoción viendo sus desfiles. Hay diseñadores que me hacen vibrar. Cada vez me cuesta más, creo que al final tantos desfiles, tanta ropa… cada vez cuesta más ¿para qué tanto? No necesitamos tanta ropa. Tienen que permanecer las cosas con esencia, bien hechas…

J.B.-¿Cuál fue tu relación con Karl Lagerfeld, Rosa?

R.C.- Yo era muy osada en aquel momento. Pensé todos estos diseñadores que son tan famosos y solo hacen un vestido de novias... Me dije, ve a verlos, explícales que tienes calidad, los mejores tejidos, los mejores fabricantes y pídeles una colección de vestidos de novia. Les dices, yo te la fabrico y te la distribuyo. Y así fue con Karl Lagerfeld y con Jesús Del Pozo…Lacroix.

J.B. - ¿Qué dice la ropa de quién la lleva?

T.H.- No es lo que emitas. Es lo que te hace sentir. Es como tu armadura. No es lo último, lo que perdure en el tiempo.

J.B.- ¿Armadura es seguridad?

T.H.- Sí, seguridad, nosotros vendemos seguridad.

R.C.- Hay una frase de Coco Chanel que me gusta mucho, dice una mujer debe sentirse elegante y fabulosa. Y elegante y fabulosa es distinto para cada persona. Por eso creo que la moda es actitud.

No es lo que la ropa dice de ti, es lo que te hace sentir. Es como una armadura"

Teresa HelbigDiseñadora

T.H.- A mí me gusta una que decía “nunca se es ni demasiado rica, ni demasiado delgada, pónganoslo todo más fácil".

R.C.- "Pónganoslo todo más fácil”es una frase muy importante para las mujeres.

J.B.- ¿Después de la pandemia seremos más esencialistas? ¿Excluiremos el adorno?

T.H.- No, el adorno no. No hay mayor triunfo que el del exceso. Pero sí excluiremos las 7.500 camisetas que no necesitamos… y a esos precios, significa que hay alguien muy jodido al otro lado. Creo y espero que le demos valor a otras cosas.

R.C.- La pandemia nos va a hacer reflexionar pero es un paréntesis. Yo creo que el no ocio, el no celebraciones, el no no no, ha hecho el no necesito, para qué me lo voy a comprar pero a la que vuelva la normalidad creo que los hábitos de consumo no van a cambiar.

T.H.- Pero que sepas a quién le vas a dar el dinero. Que tenga cierta ética.

J.B.- ¿El sentido de la moda ha quedado en entredicho durante la pandemia? ¿Para quién nos vestimos?

T.H.- Para nosotros mismos, para tener una actitud frente a los otros. Si tienes un Yves Saint Laurent de los años 70 y te lo pones hoy estarás magnífica. Es comprar cosas que emocionen y que merezca la pena. Es que soy una romántica, me encantará que un Helbig pase de generación en generación, que ya está sucediendo.

Nos vestimos para nosotros mismos, para tener una actitud frente a los otros"

Teresa HelbigDiseñadora

R.C.- Yo soy más práctica que romántica, la verdad. De hecho hacemos colecciones para todo, para países determinados, para precios determinados, para bodas en la playa, para bodas en el sol… absolutamente para todo. Hay mini cápsulas también en todas las colecciones que contemplan todo. Al viajar tanto, hay muchos factores a tener en cuenta y también intentamos adaptarnos. Es el caso de los trajes que hacemos para los países del este que complementan nuestras colecciones con grandes diámetros de faldas para adaptarnos a los gustos por ejemplo. En general todas las novias quieren sentirse fabulosas el día de su boda pero influye la cultura, el clima… influyen muchísimas cosas.

J.B.- ¿La moda para novias representa un sector fuerte en Catalunya?

R.C.- Lo ha sido. Salir de España con la marca Barcelona realmente ha abierto muchas puertas.

J.B.-¿Habéis recibido apoyos?

T.H.- Nunca.

R.C.- Alguna vez venían, yo te ayudo… pero al final nada de nada.

J.B.- Más allá de producir ropa, ¿qué camino debe emprender la moda? Hay grandes empresas que se están convirtiendo en generadoras de contenido cultural.

R.C.- Creo que nuestro principal problema ahora no es ese. Lo primero es salir de esta pandemia. Que todo empiece a ser como antes y todo comience a funcionar. Sería maravilloso en un futuro pero no ahora con la que tenemos encima.

T.H.- Acompañar la moda con otras artes es una maravilla. Hicimos los primeros fashion films, Un atraco con Helbig… hacer cosas ligadas con la moda tiene su gracia. Poco a poco deberemos cambiar la manera de presentar nuestra moda.

J.B.- ¿Ha caducado el formato de desfile?

R.C.- Para mí sí. Hay que evolucionar este tema, ir a otra historia. El desfile no es lo ideal hoy en día para transmitir a mis clientas. Hay que inventar.

El formato del desfile ha caducado. Hay que evolucionar e ir a otra historia"

Rosa ClaráDiseñadora y empresaria

T.H.- Tendremos que reinventarnos y explorar otras formas. Colaboradores, fashion Films, cortometrajes… otras cosas. Hay que cambiar porque todo ahí afuera está cambiando.

J.B.- Y el marketing...

R.C.- Es muy importante. Imprescindible. ¿Me dejas que cuente una anécdota? Yo le hice el vestido de boda a Paulina Rubio y nunca te lo he comentado, fue por tu culpa. Me sentaste junto a ella en una cena y me dijiste, se casa, tienes un buen rato para convencerla de que se haga el vestido contigo. Hace muchos años de esto, ¿puede ser más de quince? ¡sí más de quince! Hablamos durante la cena y luego contactamos. ¡Le hice cuatro vestidos! Esta colaboración para Latinoamérica fue buenísima.

T.H.- Nosotros no tenemos presupuesto para acciones de publicidad, pero sí que las celebridades que visten nuestra ropa son nuestros altavoces para darnos a conocer.

J.B.- ¿Hay mucha tontería en la moda?

R.C.- En mi casa no. No hay frivolidad ni tontería. Ahí lo que hay es esfuerzo y trabajo en todas las áreas. Es un trabajo bonito porque nos dedicamos a lo que nos dedicamos, pero frívolo nada de nada.

T.H.- Frivolidad cero. Esto es durísimo.

J.B.- ¿Cuándo os recuperaréis?

T.H.- La cosa se está reactivando como muy rápido. Estamos trabajando como locos en Madrid y Barcelona.

R.C.- Espero que sí, todo el mundo habla de los felices años 20… claro que luego llegó el 29. Pero yo creo que en septiembre esto habrá arrancado. Vengo de Estados Unidos y esto ya ha pasado. Biden dijo mascarillas fuera y es la locura absoluta. He estado en Miami y nunca había visto a tanta gente llegando de todas partes de Estados Unidos. Los pisos, las casas, hay un gran movimiento ahí y aquí creo que pronto pasará igual. En un par de meses esto estará en marcha. Claro que yo hace un año dije lo mismo y no fue así, pero calculo que en septiembre será como antes. Comenzara la recuperación. Espero.

J.B.-Acabemos con una definición de la moda que os identifique.

R.C.- Es una actitud sin duda. Y estar elegante y fabulosa, como decía Cocó Chanel me parece una definición estupenda.

La moda es una actitud. Y estar elegante y fabulosa como decía Cocó Chanel"

T.H.- Hacer vestidos únicos que pongan en valor la artesanía, que perduren en el tiempo y que no pasen desapercibidos.