Aunque parecía que Simeone tenía clara su idea para el estreno liguero contra el Celta de este fin de semana, el técnico ha ido variando su plan desde que el pasado domingo llevara a cabo el ensayo general contra el Feyenoord en Róterdam. Así, tras probar durante la semana en varias ocasiones con Kondogbia en el lugar de De Paul, este viernes ha vuelto a dar un giro de tuerca a la alineación, no solo devolviendo al once al argentino, sino cambiando también las posiciones de Marcos Llorente y Carrasco.

Aunque el belga llevaba toda la pretemporada haciendo las veces de carrilero derecho que en el curso pasado ocupó Trippier, en esta última prueba formaría en punta con Correa. De este modo, sería Marcos Llorente el que dejaría la delantera para pasar a ocupar la banda, como le ocurriera con la selección española en la Eurocopa. La otra gran novedad sería que la entrada de De Paul como interior diestro volvería a convertir a Koke en el pivote que actúe por delante de los centrales, plaza que dejaba a Kondogbia en las probaturas en las que se incluía el mediocentro de origen centroafricano.

Así las cosas, teniendo en cuenta que el sistema 3-5-2 parte otro curso más como el dibujo de cabecera, la alineación del campeón en Vigo estaría integrada por Oblak; Savic, Giménez, Mario Hermoso; Marcos Llorente, De Paul, Koke, Lemar, Saúl; Carrasco y Correa. Quedaría en la recámara de este modo para los minutos finales Luis Suárez, que continúa trabajando para alcanzar su mejor tono físico

Más allá del once y la manera de desenvolverse ante los hombres de Coudet, El Cholo también pondría especial celo en el trabajo de las jugadas de estrategia, dónde esta temporada el Atlético está llamado a dar un salto de calidad con la incorporación de un De Paul que tiene un guante en su pie y con el potencial aéreo de los Giménez, Mario Hermoso, Savic y compañía.