Lo dicen los expertos de Reebok: el movimiento es la clave a la hora de evaluar el ajuste adecuado. "Como diseñadores de sportswear, probamos el producto en un modelo que se está moviendo por toda la habitación, y tú deberías hacer lo mismo", apuntan. Así que no solo te mires en el espejo, "deberías ser consciente de tu cuerpo".
Si lo notas, se convertirá en un problema
Cuando te pruebas un sujetador deportivo por primera vez tienes que hacer caso a todas tus sensaciones. Porque debería ser una extensión de ti, pregúntate: ¿puedo notar alguna prenda en concreto más que otra? "Cualquier cosa que notes en el probador, probablemente te causará irritación o incomodidad", explican desde Reebok.
Atención al pecho
Otra pregunta que deberías hacerte es si tu pecho se está moviendo tanto como para evitar que des el 100% en tu entrenamiento. "Ten en cuenta que, aunque sean cómodos, los sujetadores deportivos con una compresión de spandex alta pueden amplificar el movimiento durante el entrenamiento", cuentan los diseñadores de Reebok.
Sobre el equilibrio
¿Tengo equilibrio en ambos lados? ¿Siento tensión en un lado o movimiento en otro? Son dos de las cuestiones que también deberías hacerte. Porque el volumen del pecho, la altura del hombro o la anchura de la espalda pueden variar de derecha a izquierda. "El desequilibrio puede crear presión en los hombros e, incluso, forzarte a cambiar el ritmo", cuentan desde Reebok. Apuesta por un sujetador que sea ajustable o suficientemente flexible para que te sientas equilibrada.
¿Pecho pequeño? Esto te interesa
Para los diseñadores de Reebok, las mujeres con pecho pequeño deben prestar especial atención a la cantidad de movimiento en las copas. "Las tallas más pequeñas tienden a no estar tan ajustadas contra el pecho, lo que puede derivar en falta de comodidad y caída del pecho ", desvelan.